Aspirando la esencia de España, entre el cielo y la tierra

Hoy, cuando la digestión con regusto a café te abraza por momentos a Morfeo, en ese justo instante en el que anhelas el soplo fresco de un ventilador que corte la angustiosa humedad caliente del salón, allí, medio estirado en el sofá entre cojines, la televisión me ha transportado y reconfortado.

La 2 reemitía este mediodía el documental España, entre el cielo y la tierra, un exquisito producto audiovisual de TVE del año 2005 que en 26 capítulos recorre toda la geografía española. En tiempos de fast food catódico en el que tipos callejeros viajeros o españoles en el quinto infierno te ofrecen productos handycam de perfil audiovisual muy bajo, se agradece que se hayan hecho productos para retinas y mentes exquisitas como esta serie.

Porque aquí se cuidan todos los detalles. Desde un guión que emana poesía, a la voz cómplice de Kepa Cueto acompañada por la música y efectos de Jesús Glück. Desde una sucesión de tomas cuidadas y ensayadas a golpe de panorámicas wescam intercaladas con travellings terrestres,  todo sin un plano fijo, sin una imagen estática que menoscabe el dinamismo pretendido y conseguido por su director José Miguel Aspiroz. Aquí cada plano es una obra de arte.

Hoy he visitado, o mejor aún, aspirado la esencia de las islas Canarias, "la tierra de los bienaventurados" en los 55 minutos del programa.

Si algún día hemos de lanzar un cohete al espacio, de esos que portan información diversa de nuestra civilización por si se topan con otras formas de vida extraterrestre, no tengo ninguna duda que entre el equipaje debería ir el documental España, entre el cielo y la tierra.

                                      Enlace todos los episodios de la serie documental

Fotograma España, entre el cielo y la tierra, Canarias

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