Vive la France "manque pierda"

Escribo estas líneas desde un pueblo medieval a pocos kilómetros de Avignon disfrutando de unos días fantásticos de desconexión. Dejar correr el tiempo en el verano agradable mas húmedo y fresco que se recuerda en mucho tiempo por estos lares, disfrutando de buenas viandas y mejores vinos, no tiene precio.

Huelo a tierra fresca de la Provence mezclada con aromas de lavanda ya seca y concentrada, aromatizada por el tomillo y el basilisco de un parterre cercano levantado al pie de unos plataneros viejos llenos de cicatrices. Escuchar el cantar de la cigarra de día o ahora, el grillo acariciando la musicalidad sonora del francés sureño en estas conversaciones nocturnas en el jardín de mis tíos, es de los pocos placeres que puedo permitirme últimamente.

Esta noche nos visita un primo con toda su prole camarguesa, nos visita portando varias botellas de un sensacional châteauneuf du pape, caldos que maridamos con la decena de quesos que mi tía nos ofrece  entre ellos un sensacional descubrimiento, el queso montañés Tome de Larzac, soberbio sobre un pedazo de pan de campagne cocido lentamente en horno de piedra.


La explosión de sabor y olor invade mis sentidos inundándome una fuerte sensación de paz y bienestar.

Mientras, una tele lejana ofrece la retransmisión de la conmemoración del 70 aniversario de la Libération de París en un país que no pasa un mes de agosto sin rememorar el evento en un chute de memoria colectiva,  un ejercicio para unos necesario, para otros sin embargo desesperadamente cansino y encubridor de los verdaderos problemas actuales.

Aprovecho el momento y sugiero un brindis por esos españoles que al frente de la brigada motorizada del general de Leclerc agrupados en el batallón conocido como La Nueve, fueron los primeros en entrar por las calles de Paris hace esta noche siete décadas. Me quito el sombrero por esos compatriotas que durante 10 años de su vida lucharon sin pausa, a vida o muerte, primero contra los fascistas hispanos erróneamente llamados nacionales y después contra los nazis.

Una amiga aprovecha el momento para brindar también por la parejita Jolie-Pitt pues hoy sabemos que se casaron hace 3 días en su mansión de Correns en la región de la PACA como se conoce por aquí a las siglas de la Provence-Alpes-Côte d´Azur enlace fotos mansión a no muchos kilómetros de donde me encuentro, lugar en el que residen cuando no están de rodaje.
 Las 1000 hectáreas del château con helipuerto y viñas dan para una privacidad más que segura. El respeto de los medios franceses con una legislación muy poco permisiva con la intromisión en la vida privada de los famosos, también ayuda en ello. Estoy seguro que si la pareja de actores se hubiesen comprado un cortijo en España algún reporterillo de Sálvame se habría colado haciéndose pasar por ejemplo por un vendimiador.
Y es que también me entero por esta amiga, que en la propiedad hacen también su propio vino, un rosado al que le han puesto el nombre de la mansión, Miraval de la Provence. Nada que envidiar -me dice ella que en una ocasión lo pudo catar- en comparación con el fresco Tavel rosé que degustamos antes en esta noche de verano acompañando al aperitivo.

Pronto la charla deriva hacia la noticia bomba que no es otra que la crisis del gobierno francés, un ejercicio preciso de depuración de Hollande y Valls para quitar a los díscolos con su política de recortes y austeridad, en especial al ex ministro de Economía, Arnaud Montebourg.

Unos opinan en la mesa que Montebourg es un oportunista que prepara ya su asalto contra Hollande cara a las presidenciales de 2017, otros como yo, creemos que sin obviar lo anterior, esta crisis política es un nuevo choque de trenes en un partido de izquierda europeo. El choque entre los que manifiestan firmemente su lealtad a unos valores de defensa social  y otros que abusando de la esencia progresista de su partido, se pliegan ante las exigencias de Alemania y del capitalismo financiero aun llevándose por delante a sus votantes y a los desfavorecidos.

Los 7 minutos de la rueda de la rueda de prensa de Montebourg resumen buena parte de los temores y errores de la izquierda europea. Vale la pena escucharlo y hacer un ejercicio de extrapolacion.


Entradas populares de este blog

El día que el surf tocó el cielo en Teahupoo Tahití