La estampida de los regidores del PP en Toledo

Los regidores del PP en el Ayuntamiento de Toledo han protagonizado uno de los episodios más deleznables que recuerdo. Abandonaron el pleno del Ayuntamiento por tal de no escuchar a una madre a la que el alcalde le había dado la palabra para que expusiese su queja ciudadana. El "delito" de esta madre es el de tener una hija pequeña con cáncer y su propósito fue el de denunciar la falta de personal especializado en el Hospital de Toledo como consecuencia de los recortes.

Duele ver en el vídeo a estos supuestos representantes del pueblo toledano abandonar altivamente el pleno mientras un padre con lágrimas en los ojos les entrega una octavilla al tiempo que le dice que lleva 5 años luchando contra el cáncer que devora a su niña.

Los sinvergüenzas excusaron su acción afirmando que se marcharon porque les estaban insultando. Solo se quedó la concejal popular Ana Isabel Bejarano.
 Si yo fuese la Cospedad inmediatamente pondría a esta mujer al frente del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Toledo y expulsaría a esos que no se dignaron a ejercer como representantes del Pueblo que los eligió. No son dignos representantes de nada ni de nadie.

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