Elefantes envenenados en Borneo
El ser humano vuelve a demostrar que no es más que un salvaje que aprendió a comunicarse oralmente y a caminar de pie. Lo vimos hace unos meses con el triste ejemplo del rey mataelefantes, el campechano que disparaba por el simple placer de matar, demostrándonos a sus súbditos su incapacidad moral para ejercer el cargo ni un minuto más -a este paso a Felipe le apodaremos también el deseado, como a Fernando VII-
Y lo hemos visto hoy en el noreste de Borneo al aparecer 10 elefantes pigmeos envenenados. Una especie en peligro de extinción que había encontrado su refugio en el parque forestal de Gunung Rara, lugar en el que la Asamblea legislativa de ese Estado instauró recientemente la prohibición de actividades agrícolas y forestales precisamente para proteger a estos elefantes pigmeos.
Otro ser humano despreciable decidió tomarse la justicia por su mano.
La imagen del pequeño elefantito junto a su madre muerta parte el corazón.
Y lo hemos visto hoy en el noreste de Borneo al aparecer 10 elefantes pigmeos envenenados. Una especie en peligro de extinción que había encontrado su refugio en el parque forestal de Gunung Rara, lugar en el que la Asamblea legislativa de ese Estado instauró recientemente la prohibición de actividades agrícolas y forestales precisamente para proteger a estos elefantes pigmeos.
Otro ser humano despreciable decidió tomarse la justicia por su mano.
La imagen del pequeño elefantito junto a su madre muerta parte el corazón.
¿Mami quién te ha hecho esto? |