La transformación de vagabundo a un tipo cool

A veces el árbol no nos deja ver el bosque. Un viejo proverbio apto para un sinfín de situaciones me viene a la cabeza en esta que os cuento. La historia de un veterano de guerra estadounidense que no pudo reinsertarse en la sociedad para la que ofreció incluso su vida. Su alcoholismo le llevó a perderlo todo, familia, amigos, casa, trabajo. Durante décadas malvivió como un homeless por las calles cruzando su mirada perdida con las miradas de asco de los transeúntes. Se llama Jim Wolf y en septiembre accedió a participar en una iniciativa del centro Degage Ministries que tiene por objetivo intentar rehabilitar y reinsertar a personas con problemas.
Dos meses después Wolf ha conseguido una vivienda, incluso ha comenzado su lucha contra el alcohol asistiendo a reuniones de Alcohólicos Anónimos. Todo empezó por un cambio de imagen como vemos en el time-lapse que el cineasta Rob Bliss hizo en colaboración con el centro. El hábito no hace al monje, es cierto, pero sí que lo dignifica.

Cuando caminemos por las calles, más en estos tiempos de dura crisis, nos encontraremos con muchos jimmy´s  tirando de su carrito de chatarra, durmiendo en un banco, estirados en unos cartones, pidiendo lismosna o tocando. No olvidemos que detrás de ellos hay personas que sufren, personas tan normales como nosotros a los que una adicción o el destino les ha llevado a esa situación. Cuando veas a un vagabundo recuerda este vídeo: qué el árbol sí que te permita ver el bosque, no los ignores, pues todos merecemos otra oportunidad.


La transformación de Jim se ha convertido ya en un viral en la red

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