Rodrigo Rato mató a Rodrigo de Rato

Si hago un ejercicio de reduccionismo simplón en relación a la salida de Rato de Bankia, sería que  Bankia ha de ser intervenida acarreando el relevo de su presidente, todo por la mala situación del Banco, derivada de la depreciación de sus activos inmobiliarios al pinchar la burbuja, una burbuja que el propio presidente relevado fue causante en su etapa como boss de la Economía española.
Ergo,Rodrigo Rato vicepresidente económico con Aznar, se ha cargado a  Rodrigo de Rato de profesión banquero.

El saneamiento del sistema financiero español pasa en primer lugar por el saneamiento de Bankia, un banco con balances negativos al tener activos inmobiliarios depreciados en casi 32 mil millones de euros.
La reforma financiera del Gobierno que exigía aprovisionamientos sobre los activos inmobiliarios se ha quedado corta, y en casos como Bankia, muy corta. Y Bankia no puede caer porque se llevaría en cadena toda la Economía española como decía antes, pues Bankia es considerada una entidad sistémica.

 Con la Sip que unificó 7 cajas de ahorros nació Bankia en 2010 con un Rodrigo de Rato exultante con su corbata verde pistacho, restregando a todos, que había impulsado el mayor grupo por volumen de negocio, casi 400 mil millones de euros y el tercero en volumen de activos. Recuerdo la satisfacción de muchos del consejo al comentar que habían superado a los catalanes de Caixa Bank en esta competición absurda de machitos bancarios.

Pero una vez más, Rato escondía un conejo podrido en su chistera. Detrás de las sonrisas y de las campanadas en el parquet, Rato había impulsado con la Sip la mayor concentración de ladrillo y suelo apestoso que se recuerda en Europa. Sólo con meter en el bote a Bancaja, el prestamista oficial de los manirrotos de la Generalitat valenciana de Camps, era lastrarse con mucha más mierda de la que ya Caja Madrid aportaba.

                                               Como en el Un dos tres de la tele, ¡campanaaa y se acaboooo!

Si Caja Madrid ya tenía un futuro marrón tras el estallido de la burbuja, Bankia lo tenía negro. De nada sirvió marear la perdiz creando la matriz BFA para agrupar los activos inmobiliarios podridos o chupar a través del FROB casi 4.500 millones en participaciones preferentes convertibles.

Bankia lastra el sistema financiero y es por eso que desde el exterior se ha instado al Gobierno a su solución.Y el Gobierno hace lo que le dicta Europa porque no estamos para tonterías patrióticas. Y si han de inyectar en Bankia otros 7 mil millones en bonos convertibles, pues se inyectan, y si ello lleva obligado el cese de Rato, pues se le echa fuera y ya está. Y si al final de todo el proceso se habrá inyectado como dicen algunos, 20 mil millones, pues no pasa nada.

Un préstamo multimillonario que da papá Estado a Bankia, en el que un deterioro en la capitalización del Banco, más que previsible, podría significar la nacionalización de facto de la Entidad.
Sin embargo aquí en España se debería de haber hecho como en Gran Bretaña al inicio de la crisis bancaria, dejarse de participaciones preferentes, cocos, frob y demás mandangas. Aquí se deberían de haber nacionalizado entidades como Bankia y otras,  y así muchos males resueltos.

Antes decía que una vez más Rato escondía un conejo podrido en su chistera.  Lo decía al hilo de su caprichosa dimisión como director gerente del Fondo Monetario Internacional en los inicios de la peor crisis financiera mundial y después de que, desde España, se luchó a muerte para poder colocarlo por delante de otros candidatos mejor preparados promovidos por otros países.

Y lo decía también   al hilo de sus declaraciones como ministro de Economía con el gabinete Aznar. Negó en todo momento que existiese burbuja inmobiliaria y que los pilares de la economía española eran sólidos. La hemeroteca sirve para recordar, aquí dejo dos informaciones publicadas en diarios de hace unos años en las que Rato negaba la burbuja y apostaba por su política económica.

http://www.aragondigital.es/noticia.asp?notid=13138&secid=9

http://www.elmundo.es/suvivienda/2003/323/1069950056.html


El tiempo ha demostrado que tenía otro conejo podrido en la chistera. Un conejo llamado burbuja inmobiliaria, que ayudó a crear con sus acciones siendo vicepresidente económico y  que al final se lo ha comido una década después siendo presidente de Bankia.


                    Si existiese un tribunal económico penal de La Haya, allí irían de cabeza el trío calaveras

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