Escrache al modelo alemán de Merkel

Me desayuno hoy lunes un excepcional artículo del gurú del Financial Times, Martin Wolf, Financial Times- El modelo alemán no es exportable  para el que el modelo alemán de moldear una Europa a su imagen y semejanza fracasará. Dice Wolf que los germanos están utilizando su poderío como la economía más grande y su posición como acreedor de los países europeos "para convertir a los miembros de la eurozona en pequeñas réplicas de sí misma y a la eurozona en su conjunto".


Las reformas que Alemania quiere esculpir a sangre y fuego en las economías de muchos países como España, son las mismas que el Gobierno del anterior Canciller Schröder llevó a cabo. Pero al contrario de lo que se piensa del modelo alemán, la productividad no aumentó por una mejora de la competitividad sino por el brusco recorte salarial aplicado por el Gobierno alemán, entre 2000 y 2006, causa por la que un 20% de los trabajadores alemanes hoy en día cobran menos de 9€ la hora.


O porque Alemania basó su crecimiento en la exportación brutal de bienes a países emergentes, algo que no pueden hacer muchas economías de la eurozona. Lo que unido a la represión salarial consiguió que el déficit por cuenta corriente germano pasase de -1,7% del PIB en el 2000 a un superávit de +7,5% siete años más tarde, al tiempo que países como España, Portugal se desplomaban a un déficit del -10% del PIB, Grecia a un -15% e Irlanda a un -5%.

Por ello se pregunta Martin Wolf si sería posible dar la vuelta a la tortilla de tal manera que Alemania se convirtiera ahora en deficitaria. Las carcajadas a la cuestión planteada se escuchan aún desde todos  rincones de los landers.

Las reglas de juego que quiere imponer Merkel, a imagen y semejanza de lo realizado hace unos años en su país, no funcionaran pues son realidades distintas en momentos diferidos.

Paralelamente el Gobierno Rajoy sigue siendo el mejor alumno de la escuela germana, hace todos los deberes aunque ello signifique mantener nuestra economía en recesión sin que recortes y aumentos impositivos generen crecimiento económico y creación de empleo.

Por ello me alegró mucho que ayer domingo el movimiento 15M volviese a retomar las calles pacíficamente. Tras meses inactivos, ahora los antaño llamados indignados, se manifestaron acompañados de una marea de todos los colores, aquellos que luchan contra los desahucios, contra los recortes en Sanidad y Educación o contra el vampirismo bancario. 

Una simbiosis, más que nunca necesaria, y que de buen seguro irá en aumento conforme pasen las semanas, con un eslogan acertado, De la indignación a la rebelión, escrache al sistema, y del que os informaré puntualmente.

              

Entradas populares de este blog

El día que el surf tocó el cielo en Teahupoo Tahití