Se marchó Constantino, excelente voz y mejor persona

Hace unos años, caminando por el barrio de las Letras de Madrid, me crucé con dos hombres que charlaban amigablemente mientras caminaban. Al pasar por su lado, mientras abstraído pensaba en mis cosas, escuché una voz para mí casi tan familiar como la de mi madre, con un timbre profundo que me resultaba increíblemente cercano. Al momento me giré esperando ver el careto de Clint Eastwood, de Darth Vader o de Sean Connery y me encontré que esos dos hombres que charlaban mientras paseaban no eran otros que Constantino Romero acompañado de Mario Gas.



Hoy Constantino nos ha dejado a los 67 años y me ha venido a la memoria aquella anécdota de primavera en el centro de Madrid. Y de entre los centenares de recuerdos audiovisuales que tengo del polifacético locutor, doblador, presentador de televisión y actor, hay uno que me marcará para siempre. Me refiero al doblaje que hizo del actor Rutger Hauer interpretando al replicante de Blade Runner y esa escena final, considerada como la secuencia de culto más grande del cine contemporáneo.

 La voz de ese replicante prestada por Constantino Romero forma parte ya nuestra banda sonora de la vida. No en vano el poeta dijo una vez que si la mirada es el espejo del alma, la voz es el alma.

Entradas populares de este blog

El día que el surf tocó el cielo en Teahupoo Tahití