El yin y el yang de La Sexta television

Domingo por la mañana. Me levanto con urgencia en aras por hacerme con el café salvador de un despertar traumático horas después de una cena sabatina con más vino peleón del deseado. Café de Colombia en su justa medida repartido con agua mineral en el interior de una cafetera italiana. Mientras espero el brotar del oro negro enciendo la televisión de la cocina. Me aparece en La Sexta, la tele más progre del mundo mundial, azote de la corrupción gracias al vuelo de SuperFolloneroman por los rincones de las Españas -o de las ex-pañas como dice un amigo- 

Vamos bien, pienso, no la cambio de momento, por lo que deposito el mando a distancia junto al cubo de la basura, cuestión accidental de sinergias debe ser. En la pantalla se emite un programa llamado ¡Vaya casas! cuyo tema consiste en que gentes de muchos posibles nos muestran las bondades de sus mansiones, pareciendo más un publirreportaje al objeto de encontrar comprador y no el de un report espumoso y sin intenciones.

                                      Enlace programa Vaya casas! La Sexta

Entre sorbo y sorbo de café observo a una reportera recién sacada de la calle Serrano, acompañando a un alemán millonetis que nos enseña orgulloso su supermegamansión en lo alto de un acantilado de Port Andratx.

Lo que se le olvida añadir a la reportera es que se encuentra en el interior de una propiedad construida en su día gracias la repugnante corrupción política de un alcalde que evolucionó de agente de la guardia civil a millonario. Un tipo por cierto al que un día vi con mis ojos vacilar por Port d´Andratx luciendo su Ferrari.

Volvemos a la reportera de la calle Serrano. En la charla con el propietario se le olvida añadir también que ese alemán, el cual presume de sus vistas panorámicas, se las ha robado a todos los mallorquines pues con la Ley en la mano allí no se debió nunca construir.

No pasa nada, aquí el paripé es reírle todas las gracias al germano poniendo rictus de asombro por el despliegue de dinero. "En esta mansión el metro cuadrado puede llegar a 12 mil euros o más" le informa el millonario a la reportera. "¡Oooh! " le replica ella.

Programa Vaya casas!

Me imagino a ese alemán degustando un gintonic desde una de sus terrazas en un atardecer de verano. Con la mirada perdida en el mar teñido de naranja y luciendo un bronceado perfecto, debe pensar en lo gilipollas que somos los españoles al permitir que políticos chorizos nos gobiernen. Hombres que venden hasta su alma por un puñado de billetes de 500 euros destruyendo lo más preciado de nuestra vida que es nuestro territorio y nuestro entorno. Todo en un sistema que permite erróneamente a las Corporaciones Locales gestionar el territorio con el resultado que ya conocemos.

Volviendo a mi cocina, mientras apuro el segundo café,  leo que en esa misma cadena de televisión, Jordi Évole hablará por la noche de la corrupción urbanística y política en su programa Salvados. 

Supongo que esto debe ser El yin y el yang de La Sexta, la tele de las risas enlatadas que crearon ZP, Contreras, Roures y Miguel Barroso, el marido de la Chacón, alrededor de una mesa camilla  en Moncloa, una tarde fría y ventosa.

Mansiones en Andratx