Papá Estado ayudará a los Ayuntamientos morosos

A los particulares nos visita el cobrador del frac cuando no pagamos o directamente nos meten un juicio. A los alcaldes y regidores en cambio les visita Papá Estado cargadito de carámelos.

Los Ayuntamientos tendrán hasta el 15 de marzo para presentar ante Hacienda el listado con las facturas sin pagar y permitir que el Gobierno ponga en marcha el plan financiero para liquidarlas. Deben ser facturas anteriores al 1 de enero de 2012 y deberán los Ayuntamientos y Corporaciones Locales adjuntar un plan de ajuste que garantice su viabilidad financiera. Los que no realicen estos planes o los incumplan, el Gobierno los castigará reteniendo la participación en los ingresos tributarios del Estado incluso durante años.

El Gobierno quiere conocer la cuantía total de las deudas que tienen los Ayuntamiento de España pues a fecha de hoy se desconoce. El agujero puede ser monumental y de escándalo. Se habla de entre 30 mil y 40 mil millones de euros.

Primero se pagarán a los proveedores que acepten una quita, o sea, un descuento de lo que se le adeuda, teniendo prioridad las facturas pendientes de pago más antiguas.

El mecanismo será el siguiente: los bancos darán un crédito a las entidades locales, avalado por el Estado, con fondos destinados a pagar a los proveedores. Es decir, que un Ayuntamiento se endeudará más para liquidar con sus proveedores. Lo bueno, que muchas pymes y autónomos asfixiados tendrán aire para respirar y poder seguir operativos. Lo malo, que muchos Ayuntamientos deberán destinar gran parte de su presupuesto al pago de los créditos limitando su capacidad gestora e inversora  en los próximos años, ya tocada de muerte por el descenso de los ingresos y de la actividad.

Aunque no se han explicado las concreciones de este ambicioso plan, por ejemplo el plazo de devolución del crédito por parte de  los Ayuntamientos,  el Gobierno si que ha dicho que quiere que sea un consorcio formado por diferentes entidades bancarias en el que participe el ICO.

Como estamos hablando de facturas ya emitidas aunque no abonadas, el déficit público no se verá incrementado pues ya están contabilizadas. Y es este punto el que ha impulsado al Gobierno.Si hubiera incrementado el déficit público que presentar ante los socios de la UE este plan no habría sido ni concebido.

España, país de pandereta, ha tenido los peores gestores públicos de cualquier país occidental europeo. Se gastaba y gastaba sin asegurar unos ingresos, o lo que es peor, si poner unas piedras sobre las que seguir un camino en época de vacas flacas. ¿Cuántos tríncones que se han beneficiado de corporaciones locales corruptas verán ahora liquidadas sus deudas?

Sólo deseo que en el previo examen de las facturas pendientes de pago se mire con lupa los importes y los conceptos no autorizándose la liquidación en aquellos casos de presunta corrupción o de gastos injustificados, o de aquellos Ayuntamientos sin un plan de viabilidad financiera creíble.

Señalados en el mapa todos los Ayuntamientos implicados en casos de corrupción

Por poner un ejemplo, si me piden 100 mil euros por un concierto de un grupo de mierda en unas fiestas de un pueblo remoto con aires de capital de provincia porque la niña del concejal de turno quería verlos desde el backstage, que se confiten la factura. Hay prioridades.

Otro ejemplo: si me piden cantidades desorbitadas en facturas infladas por servicios como recogida y tratamiento de basura en la que se denota posible corrupción, que se confiten la factura.

Otro ejemplo: si al Ayuntamiento de Madrid se le van a prestar los casi mil millones de deuda que tiene con sus proveedores, que se le manifieste que veleidades como la candidatura de los Juegos Olímpicos no tendrá el apoyo del Gobierno, pues el esfuerzo en devolución del crédito que tendrá que hacer el Consistorio de Ana Botella será tan grande que no tendrá dinero ni para pagar las habitaciones de hotel de los miembros del COI. Y señora alcaldesa creo que no sería serio nuevas operaciones salvadoras de papá Estado dentro de unos años y vuelta a empezar.

Que cada Ayuntamiento haga pública la lista de impagos, proveedores, conceptos etc, a los que destinará el crédito, para que sus conciudadanos conozcan en qué se gastó su dinero y tomen nota electoral.

Por contra me alegro por esos miles de autónomos y pequeñas empresas que realizaron trabajos honestos para los Ayuntamientos y verán por fin recompensado su trabajo.

Aunque como todo lo que pasa en este país de pandereta, hasta que no lo veo, no me lo creo.