¿Es la Seguridad Social cómplice de los asesinos?
Spain is different. Nunca un eslogan publicitario tuvo tanto fundamento. En este blog os he contado muchas veces cosas que nos hacen ser diferentes. Pero cada día te enteras de algo que supera lo anterior.
Resulta que un hombre que mató a su mujer hace 6 años y que cumple condena de 18 años en prisión cobra la pensión de viudedad desde el día siguiente en que ésta falleció. El asesino se llama Lorenzo Morell y su esposa, que era una cocinera de la población catalana de Sils, se llamaba Consuelo Galcerán.
En el proceso judicial se personó como acusación el Gobierno a través de la Delegación Especial contra la violencia de género contra la mujer. Y resulta que el Instituto Nacional de la Seguridad Social (que hasta no se demuestre lo contrario es parte de la Administración del Estado) es el que no sólo aceptó pagar la pensión al asesino, sino que no quiso hacer caso del dictamen de la Audiencia de Girona que le instó a retirar la pensión a Morell. Además se da la circunstancia que el asesino debe hacer frente a indemnizaciones a familiares de la víctima así como pagar las costas judiciales. De momento ha cobrado del erario público unos 40.000€.
Llorenç Morell, el asesino durante el juicio
Lo dicho, somos diferentes.
Yo, lo que haría en este caso, aparte de retirar la pensión de viudedad ipso facto al condenado, sería investigar a los funcionarios responsables de la Seguridad Social en tal barbaridad, y una vez encontrado nombres y apellidos, separarlos del servicio y enviarlos al paro por ineptos. Cambiar la ley Administrativa para permitir "echar" a un funcionario cuando manifieste total ineptitud es todavía algo pendiente en nuestro país.
(Añadido unas horas más tarde: La Seguridad Social ante el escándalo, y presiones de "arriba", provocadas por esta noticia, ha decidido revocar la concesión de esta pensión de viudedad y reclamar lo abonado hasta hoy al condenado).
Añadido el 14/12/11:
Otro caso de un asesino que mató a su mujer e hijo y cobra la pensión de viduedad.
El profesor Nemesio Antonio P.D., condenado a 26 años de prisión por matar de un tiro en la cara a su mujer y de tres al hijo de ambos cuando trataba de defenderla en el chalé familiar de la localidad vallisoletana de Laguna de Duero, percibe la pensión de viudedad de la víctima, María Teresa D.J.T.
Según una información del periódico 'El faro de Vigo' recogida por Europa Press, el profesor, que mató a su mujer y a su hijo el 25 de agosto de 1998, ha cobrado durante los últimos trece años ha cobrado la pensión correspondiente a la mutua de clases pasivas por la fallecida, que ascendía a más de 800 euros al mes en el último año.
Desde el pasado mes de marzo, Nemesio Antonio P.D. percibe la pensión máxima legal, de unos 2.400 euros, al sumar su propia jubilación.
El profesor solicitó la pensión de viudedad cuando estaba en prisión provisional ya que la condena no se hizo firme hasta que el Tribunal Supremo emitió en 2011 una resolución que estimaba parte de su recurso y le redujo la condena de 36 años que fijó la Audiencia de Valladolid a 26 años.
Además, el profesor sale a diario de la prisión de Pereiro (Orense) a las 7 de la mañana y regresa a las 21 horas y tiene permiso para acudir a clases de informática, además de que tiene alquilado un piso donde come y se mueve en moto o en coche.
Los beneficios penitenciarios de los que disfruta el profesor, que perdió su condición de funcionario en 2003 por el doble crimen, fueron concedidos por el juez de Vigilancia Penitenciaria de Pontevedra y Orense pese a la negativa de la Junta de tratamiento de la prisión orensana. El juez valoró el hecho de que el condenado había pagado la indemnización a su hijo pequeño y a su suegra.
Resulta que un hombre que mató a su mujer hace 6 años y que cumple condena de 18 años en prisión cobra la pensión de viudedad desde el día siguiente en que ésta falleció. El asesino se llama Lorenzo Morell y su esposa, que era una cocinera de la población catalana de Sils, se llamaba Consuelo Galcerán.
En el proceso judicial se personó como acusación el Gobierno a través de la Delegación Especial contra la violencia de género contra la mujer. Y resulta que el Instituto Nacional de la Seguridad Social (que hasta no se demuestre lo contrario es parte de la Administración del Estado) es el que no sólo aceptó pagar la pensión al asesino, sino que no quiso hacer caso del dictamen de la Audiencia de Girona que le instó a retirar la pensión a Morell. Además se da la circunstancia que el asesino debe hacer frente a indemnizaciones a familiares de la víctima así como pagar las costas judiciales. De momento ha cobrado del erario público unos 40.000€.
Lo dicho, somos diferentes.
Yo, lo que haría en este caso, aparte de retirar la pensión de viudedad ipso facto al condenado, sería investigar a los funcionarios responsables de la Seguridad Social en tal barbaridad, y una vez encontrado nombres y apellidos, separarlos del servicio y enviarlos al paro por ineptos. Cambiar la ley Administrativa para permitir "echar" a un funcionario cuando manifieste total ineptitud es todavía algo pendiente en nuestro país.
(Añadido unas horas más tarde: La Seguridad Social ante el escándalo, y presiones de "arriba", provocadas por esta noticia, ha decidido revocar la concesión de esta pensión de viudedad y reclamar lo abonado hasta hoy al condenado).
Añadido el 14/12/11:
Otro caso de un asesino que mató a su mujer e hijo y cobra la pensión de viduedad.
El profesor Nemesio Antonio P.D., condenado a 26 años de prisión por matar de un tiro en la cara a su mujer y de tres al hijo de ambos cuando trataba de defenderla en el chalé familiar de la localidad vallisoletana de Laguna de Duero, percibe la pensión de viudedad de la víctima, María Teresa D.J.T.
Según una información del periódico 'El faro de Vigo' recogida por Europa Press, el profesor, que mató a su mujer y a su hijo el 25 de agosto de 1998, ha cobrado durante los últimos trece años ha cobrado la pensión correspondiente a la mutua de clases pasivas por la fallecida, que ascendía a más de 800 euros al mes en el último año.
Desde el pasado mes de marzo, Nemesio Antonio P.D. percibe la pensión máxima legal, de unos 2.400 euros, al sumar su propia jubilación.
El profesor solicitó la pensión de viudedad cuando estaba en prisión provisional ya que la condena no se hizo firme hasta que el Tribunal Supremo emitió en 2011 una resolución que estimaba parte de su recurso y le redujo la condena de 36 años que fijó la Audiencia de Valladolid a 26 años.
Además, el profesor sale a diario de la prisión de Pereiro (Orense) a las 7 de la mañana y regresa a las 21 horas y tiene permiso para acudir a clases de informática, además de que tiene alquilado un piso donde come y se mueve en moto o en coche.
Los beneficios penitenciarios de los que disfruta el profesor, que perdió su condición de funcionario en 2003 por el doble crimen, fueron concedidos por el juez de Vigilancia Penitenciaria de Pontevedra y Orense pese a la negativa de la Junta de tratamiento de la prisión orensana. El juez valoró el hecho de que el condenado había pagado la indemnización a su hijo pequeño y a su suegra.
