¿Urdangarin más sordo que una tapia?

Urdangarin se libró de hacer la mili alegando que padecía una sordera. Este chico no para de sorprendernos. A perro flaco todo son pulgas y al Duque le hará falta una buena loción de autan que podría venirle en forma de sentencia condenatoria.

Todos los que tuvieron que realizar el servicio militar obligatorio hubieran querido ser Iñaki y tener sus contactos. La mili era para la mayoría de los reclutas la perdida de tiempo más grande en la biografía de una persona, aunque extrañamente con el paso de los años sucede algo paranormal: los malos recuerdos se difuminan y a muchos les sobreviene un cierto síndrome de Estocolmo al recordar peripecias,  pero esto es material para otra entrada en el blog.

En 1992 Urdangarin fue declarado apto para el servicio militar, entró en sorteo y le tocó de destino Ceuta. Un año después, semanas antes de incorporarse a filas, presentó la solicitud de exención por padecer hipoacusia bilateral en evolución. El tribunal médico aceptó está solicitud y le concedió una exención temporal de dos años vinculada a una posterior revisión. Tanto va el cántaro a la fuente que al final en 1995 fue excluido definitivamente  del servicio militar obligatorio en una última revisión. El Mundo que es el que ha dado la exclusiva accediendo a los documentos médico militares, publica el documento de exención definitiva. En el se puede leer textualmente, escrito a mano, el comentario  a pie de informe del médico que lo examinó por última vez dirigido a su superior " ...quizá hubo algo de exageración pues hasta los sordomuodos exageran.... si lo prefiere puedo examinarlo de nuevo..."

 No fue necesario, en 1997 Urdangarin ya  estaba comprometido con la Infanta Crisitina, y todo su expediente fue reclamado por la Dirección Central de Reclutamiento, imagino que para evitar filtraciones a la prensa.
                       
                                                  Urdangarin ya no sabe por dónde le van a caer

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